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KnoWhy #603

¿Por qué Oliver Cowdery fue excomulgado de la iglesia?

mayo 14, 2021
KnoWhy #603
Retrato de Oliver Cowdery. Paisaje del Far West por Al Rounds.
Retrato de Oliver Cowdery. Paisaje del Far West por Al Rounds.
“[Y] a Oliver Cowdery, también llamado por Dios, apóstol de Jesucristo, para ser el segundo élder de esta iglesia, y ordenado bajo su mano”
Doctrina y Convenios 20:3

El conocimiento

Después de José Smith, no hubo un testigo más importante en los inicios de la restauración de la iglesia que Oliver Cowdery. Exceptuando a José, él estuvo presente por más tiempo en la traducción del Libro de Mormón que cualquier otra persona y participó en varios acontecimientos extraordinarios de la restauración. Sin embargo, a pesar de esas experiencias espirituales extraordinarias, en 1837, comenzaron a surgir diferencias entre Oliver y José. El “segundo élder” (DyC 20:3) de la iglesia sería excomulgado por el sumo consejo el 12 de abril de 1838, en Far West, Misuri. Este fue un “consejo común de la iglesia” (DyC 107:82–84), presidido por el obispo Edward Partridge1.

Los factores que dieron lugar a esta acción son muchos y complejos, y varios hechos importantes detrás de los nueve (o diez) cargos que se formularon en contra de Oliver nos son desconocidos hasta el día de hoy. Sin embargo, ninguno de estos cargos tuvo algo que ver, directa o indirectamente, con el testimonio personal de Oliver sobre el Libro de Mormón, que permaneció firme durante toda su vida2.

Es importante comprender que la excomunión de Oliver no fue un incidente aislado. Se presentaron nueve cargos en su contra, y al día siguiente, el apóstol Lyman E. Johnson y su compañero testigo del Libro de Mormón David Whitmer fueron excomulgados por varios cargos similares3. Los tres casos fueron eficazmente agrupados y fueron escuchados por prácticamente los mismos jueces4, y ninguno de ellos eran líderes prominentes en la iglesia. Dos de los jueces, George Hinkle (quien luego sería un traidor para los santos) y George Harris, también se ofrecieron como testigos. Inevitablemente, en una comunidad pequeña, todos estos jueces conocían personalmente a los tres acusados.

Con respecto a los nueve cargos enumerados que se presentaron en contra de Oliver Cowdery, los cargos 4, 5 y 6 finalmente fueron retirados por el tribunal. Sobre los seis cargos restantes, el tribunal escuchó el testimonio de diez testigos5 sobre quienes basó su decisión6.

“1º. Por incitar al enemigo a perseguir a los hermanos, instándolos a pleitos y angustiando así a los inocentes” y “7º. Por abandonar su llamamiento, al que Dios lo había designado, por revelación, en aras del lucro inmundo y regresar a la práctica de la Ley”.

Cuando Oliver se mudó a Misuri en 1837, trató de pagar sus deudas personales comenzando una carrera como abogado7. Los testigos declararon que Oliver había alentado a la gente a demandar a otros en los tribunales que “disparaban armas en el pueblo”, que quebrantaban “el día de reposo”, él “frecuentemente solicitaba negocios para cobrar deudas” e “invita[ba] a entablar demandas contra otros”. Amplios testimonios respaldaban los cargos 1 y 7, aunque Oliver solo actuó como normalmente lo haría un abogado.

“2º. Por buscar destruir la reputación del presidente José Smith, hijo, al insinuar falsamente que era culpable de adulterio, etc.”.

David Patten menciona que Oliver, en privado, le comentó acerca de un “lío de adulterio”, que José supuestamente había “confesado a Emma”. Thomas Marsh testificó que se le había preguntado a Oliver si José “alguna vez le había confesado que era culpable de adulterio”, a lo que Oliver había respondido que “no”, aunque después de “un marcado guiño, etc.”, al parecer insinuando (incorrectamente) que en realidad era verdad. Luego José le preguntó a Marsh “si él [Oliver] alguna vez le dijo que él [José] se lo confesó a alguien”, a lo que Marsh respondió: “[N]o”. Por lo tanto, el cargo 2 se mantuvo con respecto a que Oliver había hecho falsas insinuaciones.

En ese momento del juicio, el mismo José Smith subió al estrado. “[T]estifi[có] que Oliver Cowdery había sido su amigo íntimo, por lo que le confió muchas cosas. [José] entonces contó una historia con respecto a un asunto con la muchacha”, lo que debe haber satisfecho al tribunal, de alguna manera creíble, que lo que sea que haya pasado entre José y Fanny Alger (la joven que ayudaba a Emma en la casa, quien se fue de Kirtland en 1836)8 no debería considerarse como inaceptable. De otra manera, el tribunal no hubiera encontrado culpable a Oliver por el segundo cargo.

“3º. Por tratar a la iglesia con desprecio, al no asistir a las reuniones”.

Esto fue apoyado por John Corrill, quien declaró de manera resumida que Oliver había “rechazado asistir a la reunión”, con lo que el juez y testigo George Harris estuvo de acuerdo. Oliver había servido como secretario de las reuniones del consejo de la iglesia desde el 10 de marzo de 1838, pero aparentemente no había estado asistiendo a las reuniones regulares de la iglesia con frecuencia, aunque había estado terriblemente enfermo por seis semanas y en asignación en el condado de Davies.

“8º. Por deshonrar a la iglesia al mentir sobre estar relacionado en negocios ‘fraudulentos’ como dice un informe común” y “9º. Por retener deshonestamente pagarés, después de haber sido pagados y finalmente por dejar o abandonar la causa de Dios, y tomar para sí mismo cosas mundanas y descuidar su llamamiento elevado y sagrado por atender su profesión.

Los cargos restantes 8 y 9 fueron fuertemente apoyados por las declaraciones de los testigos al decir que: (a) Oliver había estado involucrado en la impresión de dinero falso y casi fue arrestado en Kirtland por hacer troqueles [moldes] para imprimir “dinero falso”, pero se había ido para evitar presentarse a juicio; (b) que había tomado de manera deshonesta una imprenta y letras de Kirtland; (c) y que no había entregado los pagarés que le extendieron José y Sidney.

En resumen, el consejo sostuvo que Oliver había “olvida[do] la causa de Dios, y dedicándose a sí mismo a las cosas inmundas y descuidando su llamamiento elevado y sagrado por atender su profesión. Después de escuchar toda la evidencia, el obispo Partridge y el consejo llegaron a la conclusión de que seis de los cargos en contra de Oliver se comprobaron, justificando su decisión de que Oliver “no fuera considerado más como miembro de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días”. Estos fueron todos los motivos por lo que Oliver fue excomulgado.

El porqué

El porqué sucedió la excomunión de Oliver es una pregunta complicada, hay muchas razones, todas ellas lamentables. Como lo muestran las minutas de su audiencia de excomunión, una característica central del desacuerdo de Oliver fue la interferencia del liderazgo de la iglesia en los asuntos temporales de los miembros. Este problema había separado al Cuórum de los Doce Apóstoles en Kirtland en 1836, llevando a que William E. McLellin, Luke S. Johnson, John F. Boynton y Lyman E. Johnson se apartaran de la iglesia.

Para cuando el juicio de Cowdery fue llevado a cabo en abril de 1838, las relaciones con los líderes de la iglesia eran tales que ni él, ni Lyman E. Johnson, ni David Whitmer asistieron en persona9. En cambio, Oliver optó por enviar solamente una carta al obispo Partridge en respuesta a tres de los cargos (núms. 4, 5 y 6) que se le imputaban, descartando la oportunidad de reconciliarse, resolver las diferencias y renovar la unidad de la fe con sus queridos amigos y compañeros en el reino.

Sin embargo, más allá de las diferencias sobre la propiedad, estaba el determinante rechazo de Oliver hacia toda la autoridad de la iglesia. Se negó a ser gobernado por cualquier autoridad eclesiástica y, por lo tanto, admitió que había vendido sus tierras en el condado de Jackson actuando en contra de las instrucciones que había recibido por revelación por parte de los líderes. Este argumento no solo tenía que ver con Oliver. Era un principio común anticonfesional de muchas iglesias protestantes que surgieron en las guerras de Reforma, que lucharon contra los controles políticos y de propiedad que ejercía la iglesia Católica Romana. Fue este principio el que llevó a los peregrinos a huir a América, algunos de los cuales Oliver reivindicó con orgullo como sus venerables antepasados.

Algunas personas se han preguntado si Oliver se sintió rechazado cuando los oficiales de la iglesia fueron reorganizados en la conferencia de Far West el 7 de noviembre de 1837. José Smith, hijo, fue elegido por unanimidad. Sidney Rigdon también fue escogido por unanimidad como primer consejero. Pero cuando se debatió y rechazó a Frederick G. Williams, Hyrum Smith fue elegido como segundo consejero. Oliver ni siquiera fue considerado10.

Además, Oliver se alejó aún más de la iglesia organizada. En lugar de aceptar incluso una forma limitada de asociación organizativa y una obligación comunitaria, enfatizó que sería “influenciado, gobernado o controlado” solamente por su “propio juicio”11. Oliver se excedió al no reconocer cualquiera de sus propias fallas u obligaciones con la comunidad de fieles creyentes. En su lugar, se dedicó a ridiculizar, insultar, acusar y afirmar de forma exagerada que los dirigentes intentaban “establecer una especie de gobierno mezquino”12. Más tarde lamentaría perder su relación con los santos, a quienes amaba profundamente; pero al mismo tiempo, él y otros languidecían.

Oliver se negó a responder a cualquiera de las otras acusaciones, escribiendo: “Las pasaré por alto y tomaré cierta postura con respecto a ellas, mientras me sienta obligado por mi honor, a responder ante mi creciente prosperidad”13. En lugar de tratar el problema con prontitud, Oliver terminó siendo excomulgado porque pensó que podría ignorar el presente y hacer a un lado los problemas, para atenderlos más adelante. Evidentemente, no fue una elección acertada, ya que el futuro podría no ofrecer esa oportunidad. Por como resultarían las cosas, a Oliver solo le quedaría una docena de años de vida. Al final, dejó poco como forma de “respuesta a [su] creciente prosperidad” o a sus hermanos y hermanas en el evangelio.

Al creer que los líderes de la iglesia estaban sobrepasando sus límites y estaban intentando “tomar de [él] una porción de [sus] privilegios constitucionales y derechos inherentes”, Oliver decidió “retirarse de una sociedad [por] asumir que tenían tal derecho”14. Aquí, Oliver intentó culpar a la iglesia, en lugar de por lo menos preguntarse de alguna manera: “Señor, ¿soy yo?”. Por lo tanto, incluso si el consejo hubiera escogido no excomulgarlo, Oliver ya se había retirado de la membresía de la iglesia por su propia iniciativa. En esencia, no fue excomulgado, sino que se alejó.

Aunque Oliver abandonó la iglesia por un tiempo, por muchas razones, pero principalmente por problemas burocráticos y eclesiásticos con los líderes de la iglesia, nunca vaciló en su testimonio del Libro de Mormón o de los orígenes divinos de la restauración. En un encuentro casual a finales de ese verano, Thomas B. Marsh, que para entonces también había abandonado la iglesia, preguntó a Oliver Cowdery y a David Whitmer si seguían manteniendo su testimonio del Libro de Mormón. Ambos respondieron con un enfático “sí”15. Diez años después de ser excomulgado, Oliver Cowdery regresó a la iglesia y fue bautizado nuevamente16.

Otras lecturas

Scott H. Faulring, “The Return of Oliver Cowdery”, en Oliver Cowdery: Scribe, Elder, Witness, ed. John W. Welch y Larry E. Morris (Provo, UT: Neal A. Maxwell Institute of Religious Scholarship, 2006), 321–362.

Jeffrey N. Walker, “Oliver Cowdery’s Legal Practice in Tiffin, Ohio”, en Days Never to be Forgotten: Oliver Cowdery, ed. Alexander L. Baugh (Salt Lake City y Provo, UT: Deseret Book y BYU Religious Studies Center, 2009), 295–325.

Richard Lloyd Anderson, “Cowdery, Oliver”, en Encyclopedia of Mormonism, 4 vols., ed. Daniel H. Ludlow (New York: Macmillan, 1992), 1:335–340.

 

1. Los otros miembros del sumo consejo que estuvieron presentes durante el juicio a Oliver fueron Samuel H. Smith, Jared Carter, Thomas Grover, Isaac Higbee, Levi Jackman, Solomon Hancock, George Morey, Newel Knight, George M. Hinkle, George W. Harris, Elias Higbee y John Murdock. Véase Minute Book 2, 12 April 1838, pág. 118.
2. Para conocer un resumen de la vida de Oliver Cowdery, véase Richard Lloyd Anderson, “Cowdery, Oliver”, en Encyclopedia of Mormonism, 4 vols., ed. Daniel H. Ludlow (New York: Macmillan, 1992), 1:335–340.
3. Los cargos que fueron presentados en contra de ellos tres incluyeron (a) no asistir a las reuniones, (b) escribir cartas que insultaban al sumo consejo, (c) dañar la reputación de José Smith, (d) dañar el renombre de la iglesia; y los cargos contra dos de ellos eran (e) demandar o amenazar con demandar, (f) decir falsedades (g) alinearse con los disidentes de Kirtland, (g) descuidar su alto y santo llamamiento y (h) no guardar la palabra de sabiduría. Además, otros cargos especiales se presentaron en contra de cada uno de ellos en forma individual.
4. Diez de los doce jueces fueron los mismos en los tres casos.
5. Los testigos eran los siguientes: 4 sobre los cargos 1 y 7 (John Corrill, John Anderson, Dimick Huntington, George Hinkle), 4 sobre el cargo 2 (George Harris, David Patten, Thomas Marsh, José Smith), 2 sobre el cargo 8 (Frederick Williams, José Smith), y 2 sobre el cargo 9 (José Smith, Sidney Rigdon).
6. A menos que se indique lo contrario, todas las citas son de la minuta de Far West Record (Minute Book 2), 12 April 1838, págs. 118–126, en línea en josephsmithpapers.org.
7. Richard Lloyd Anderson, “Oliver Cowdery, Esq.: His Non-Church Decade”, en To the Glory of God: Mormon Essays on the Great Issues—Environment, Commitment, Love, Peace, Youth, Man, ed. Truman G. Madsen y Charles D. Tate (Salt Lake City, UT: Deseret Book, 1972), 200.
8. Para los propósitos actuales, los hechos y opiniones con respecto a cuándo pudo haber ocurrido tal relación son ampliamente discrepantes. Véase Brian C. Hales, “Fanny Alger and Joseph Smith’s Pre-Nauvoo Reputation”, Journal of Mormon History (Fall 2009): 139–177. Se podrían responder muchas preguntas si tan solo supiéramos un poco más acerca de lo que José dio como su versión de esta historia en esa primera ocasión en abril de 1838. Incluso antes de mediados de enero, José había dicho “públicamente” en Kirtland que Oliver “había confesado a [José] que [él, Oliver] había deliberadamente mentido” acerca de José, por lo que Oliver esperaba “una explicación”, pero hasta ese momento Oliver dijo que él y José seguirían siendo “dos”. El asunto de mayor gravedad del establecimiento de la poligamia de José Smith, como parte de la restauración de todas las cosas será explicado en un KnoWhy posterior, que trata especialmente de Doctrina y Convenios 132.
9. Véase “Historical Introduction”, Minutes, 12 April 1838, en línea en josephsmithpapers.org.
10. Far West Record (Minute Book 2), 7 November 1837, págs. 82–83, en línea en josephsmithpapers.org.
11. Far West Record (Minute Book 2), 12 April 1838, págs. 120–121, en línea en josephsmithpapers.org.
12. Far West Record (Minute Book 2), 12 April 1838, pág. 121, en línea en josephsmithpapers.org.
13. Far West Record (Minute Book 2), 12 April 1838, pág. 122, en línea en josephsmithpapers.org.
14. Far West Record (Minute Book 2), 12 April 1838, pág. 121, en línea en josephsmithpapers.org.
15. “History of Thomas Baldwin Marsh”, Deseret News, 24 March 1858, 18.
16. Véase Scott H. Faulring, “The Return of Oliver Cowdery”, en Oliver Cowdery: Scribe, Elder, Witness, ed. John W. Welch y Larry E. Morris, (Provo, UT: Neal A. Maxwell Institute for Religious Scholarship, 2006), 321–362.

Traducido por Central del Libro de Mormón